Comerse el mundo

1A los 30 es frecuente, al levantarte por la mañana, una sensación de que te vas a comer el mundo.

Quizá no hoy, pero, mañana o pasado mañana.

Cuando rebasas los 50 es frecuente, al acostarte por la noche, dar gracias porque el mundo no te haya comido.

Y desear lo mismo para mañana y para pasado mañana.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.