Sólo dos pies

Me apetecía decirte esta noche un tequiero y no recibir respuesta.
Sacarte a bailar sin que nos pisáramos, pasear por una playa oscura, con las luces de la ciudad lejos y las olas mojando los pies. Sólo dos pies. Acariciarte sin tocarte, besarte sin rozar los labios. Me apetecía dormir contigo sin tus piernas, sin tus brazos, sin tu respirar, ni tu calor.
Por eso no te llamé.
Por eso no te busqué.
Porque me apetecía decirte esta noche un tequiero y no recibir respuesta.

2 comentarios sobre “Sólo dos pies

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.