Medicamentos

Un día de estos van a inventar un medicamento que compense nuestros estados de ánimo, que nos vuelva ecuánimes y equilibrados, y ese día nos van a joder bien jodidos.

Ya no habrá subidas y bajadas. No saldremos a la calle con ganas de besar al primero que pase. Si vemos un señor con un perro de esos pequeñajos con lacitos cagándose en la acera —el dueño mirando a otra parte— no nos entrarán ganas de matarlo (al señor, claro). En cosas como ésa se notará que nos han ajustado la serotonina, nos han equilibrado la proteína de la pena y nos han estabilizado las hormonas que nos arrebatan.

Se acabaron entonces las cartas de amor, las canciones románticas, los piropos por las calles…

Y ese día, los habitantes de la Tierra nos pasearemos con esa sonrisa insípida que lucen los psiquiatras (casi todos).

Luego no digáis que no os he puesto sobre aviso.

Publicado en a2manos el 05 dic 2005

8 comentarios sobre “Medicamentos

  1. Hablando de piropos, hoy estaba escuchando una canción en directo del grupo mexicano «Botellita de Jerez», en la presentación piden a una de las mujeres del público que diga en voz, bien alta, un piropo guarro que le hayan tirado y una suelta desgañitándose; «Prietita vamos a ponerle mayonesa al camarón!». Luego cada uno del grupo dice alguno de su colección particular: «quien fuera mosca de charco para pararme en tu caca», «prietita que si chocamos no te quitan la lisensia», etc. Hay que leerlo con acento mex eso si.

  2. Seguro que ese medicamento ya está inventado, pero no lo habrán querido sacar al mercado todavía porque si no tenemos cambios de ánimo no nos entran las ganas compulsivas de comprar cosas: perros de esos pequeñajos, canciones de amor, cartas y piropos por sms…

  3. Hola chicos, he estado de vacaciones, y llego y os encuentro tan transcendentales, que no se muy bien si volverme.
    ¿Cómo vamos a pretender que la ciencia modifique la pena, el amor, la alegría, el placer? Esto pertenece aún a lo desconocido, y por mí que siga a sí.
    Y lo siento, pero no estoy de acuerdo, decir te quiero es bien dificil.

  4. Mientras no nos toquen las feromonas, todo irá bien…

    Por cierto…
    la pena no es una proteína, es una toxina.

  5. Los habitantes de la tierra somos irreductibles. Aunque pudieran colocarnos bien la serotonina, siempre nos quedarà la noradrenalina, la oxitocina… y decenas de sustancias, aun no bien conocidas, que sustentan las cartas de amor

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.